Esta región esta ligada a la historia misma de la provincia, desde las actividades de sus antiguos, hasta nuestros días.
Las Sierras Chicas ofrecen una amplísima gama de posibilidades ya que la mayoría de sus rincones se mantienen casi intactos y bastante lejos de la civilización.
Otro hecho trascendente es que muchas de las localidades que integran la región forman parte del Antiguo Camino Real que permiten disfrutar de una opción histórica muy tentadora. Con el crecimiento de Córdoba durante el período colonial fueron surgiendo distintas poblaciones en la campiña convirtiéndose en villas veraniegas destacadas por su proximidad con la capital cordobesa, el clima de montaña, las sierras y arroyos.
Estas villas fueron elegidas como exclusivos destinos turísticos desde el siglo pasado hasta la actualidad. Estás localidades se han convertido en pueblos y ciudades que conforman la nueva metrópolis cordobesa.
La Calera y sus importantes referencias históricas de orden religioso y cultural.
Villa Allende, al pie del cerro Pan de Azúcar, con su exclusiva cancha de golf. Unquillo y el atractivo Museo Lino E. Espilimbergo, como así también la Capilla de Leonor construida y decorada por el pintor Guido Buffo. Más al norte Río Ceballos considerado “Corazón de las Sierras Chicas.” Con capacidad de agrupar gran variedad de actividades culturales y turísticas, con su Capilla Vieja nombrada Monumento Histórico Provincial, la Reserva Hídrica Natural, el Dique, los Arroyos y Saltos de agua.
Continuando el recorrido encontramos a Salsipuedes con su monumental Gruta en honor a la Virgen de Itatí. El Manzano y Agua de Oro, sus ríos transparentes, la cercanía a la consagrada Capilla de Candonga. Son parte también del valle de las Sierras Chicas Villa Ani Mí, La Granja, Ascochinga premiada con el legado de la Época Colonial de la Estancia “La Paz”, la cual perteneció a Julio Roca. A pocos kilómetros de este cordón serrano se encuentran importantes localidades festivas y culturales como lo son Colonia Caroya, y su “Fiesta del Salame Casero,”Jesús María y el tradicional “Festival de Doma y Folklore”. Encontramos también la casa de Caroya, la Iglesia y el Claustro Santa Catalina.